Por fin llegó el día de probar el Bloodborne y poder ver el maravilloso y tenebroso mundo que nos ha creado From Software, para lo que no lo sepáis esta compañía se ha hecho famosa gracias a la saga Souls (Demon Souls y Dark Souls). Estos dos juegos tuvieron tanto éxito con la crítica como con el público, ya que su jugabilidad, su diseño y sobre todo su dificultad hicieron que lo amases, un reto constante que te incitaba a seguir jugando muerte tras muerte. De la saga Souls el Bloodborne coge prestadas muchas mecánicas pero se sabe diferenciar y tiene su propia personalidad.

Como en la mayoría de los juegos de rol lo primero que tenemos que hacer es crearnos nuestro personaje, el editor permite muchas configuraciones de personalización y con nueve clases a elegir que modifican los parámetros de cada habilidad, no es el mejor que he visto pero tampoco el peor. Una vez creado el personaje empezará nuestra aventura!!!! Lo primero que te das cuenta el mimo con el que Sony ha tratado a este juego ya que viene perfectamente traducido y doblado al castellano y en este caso y como viene siendo habitual por Sony últimamente el doblaje es de los buenos, aunque si eres de los que lo prefieres jugar en inglés pues no te preocupes que podrás seleccionar el idioma que más te guste.

Nada más empezar el juego aparecemos en un mundo que se llama Yharnam, este mundo me recuerda mucho al diseño de los Castlevanias con su estilo gótico o como lo llaman ahora “estilo Londres victoriano”. El diseño de los escenarios en mi gusto es de los mejorcito que he visto en muchos años, eso si no todo son buenas cosas ya que en cuanto a gráficos y calidad del motor del juego no es que sea malo pero me esperaba más. Volvemos al diseño pero esta vez de personajes y otra vez nos vuelven a sorprender cada personaje principal, cada enemigo y como no cada boss tiene un diseño tremendo, tienes enemigos de todos los colores y de todos los tamaños, eso si todos tiene una cosa común su mala leche, ya que cualquiera de ellos puede hacer que nuestra partida llegue a nuestro fin.

El sistema de juego es desafiante y rápido, los ataques son muy ágiles, para mi gusto mucho más divertido que en la saga Souls que eran más estáticos, con defensa, ataque y huída. Aquí todo va más rápido con lo que lo hace más divertido y accesible para un mayor público, eso si la dificultad sigue ahí ya que en este juego vas a morir muchas veces y lo sabes, pero cuando mueres sabes  que ha sido por tu culpa ya que has planteado mal el ataque o que no has estado atento o lo que sea, con lo que te desafía a superarte y esa sensación que tenías en los juegos de antaño que te parecía imposible un nivel o un enemigo y lo intentabas y lo volvías a intentar y nada ( te daban ganas de tirar el mando) y dices bueno lo intento por última vez y zas!!! Lo has conseguido!!! La sensación que te deja es indescriptible. Pues con el Bloodborne pasa lo mismo, te desafía, te desespera pero al final cuando lo consigues pasar la satisfacción que te produce es increíble, y lo dicho anterior mente gracias a esa jugabilidad tan ágil hace que vuelvas a jugar, vuelvas a intentar matar al enemigo que parecía imposible una y otra vez hasta que lo consigues.

No quiero entrar mucho en la trama del juego ya que no soy amante de los spoilers con lo que os invito a todos a probar este juego que  para mi gusto es uno de los imprescindibles del catálogo de la PS4.