Hezbollah intensifica ataques con cohetes mientras Israel envía más tropas al Líbano

Hezbollah lanzó otra andanada de cohetes contra Israel el martes, mientras el líder interino del grupo militante prometía mantener la presión que ha obligado a miles de israelíes a abandonar sus hogares cerca de la frontera libanesa. El ejército israelí dijo que envió más tropas terrestres al sur del Líbano y que un alto comandante de Hezbollah fue asesinado en un ataque aéreo.

Decenas de cohetes disparados por Hezbollah apuntaron hasta el sur de Haifa, y el gobierno israelí advirtió a los residentes al norte de la ciudad costera que limitaran sus actividades, lo que provocó el cierre de más escuelas. El ejército israelí dijo que Hezbollah lanzó alrededor de 180 cohetes a través de la frontera.

El jeque Naim Kassem, líder interino de Hezbollah, dijo que sus capacidades militares permanecen intactas después de semanas de intensos ataques aéreos israelíes en grandes partes del Líbano y ataques que mataron a sus principales comandantes en cuestión de días. Afirmó que las fuerzas israelíes no han podido avanzar desde que lanzaron una incursión terrestre en el Líbano la semana pasada.

Kassem, hablando por video desde un lugar no revelado, dijo que Hezbollah nombrará a un nuevo líder para suceder al líder de larga data Hassan Nasrallah, “pero las circunstancias son difíciles debido a la guerra”.

Además, lea: Mercado de adhesivos electrónicos

En una declaración dirigida al pueblo del Líbano, el primer ministro israelí Benjamin Netanyahu calificó a Hezbollah como “más débil de lo que ha sido en muchos, muchos años”. Añadió: “Eliminamos a miles de terroristas, incluido el propio Nasrallah, y el reemplazo de Nasrallah, y el reemplazo de su reemplazo”, pero sin nombrarlos.

Nasrallah fue asesinado en un ataque aéreo israelí en Beirut el mes pasado. Hashem Safieddine, primo de Nasrallah que supervisa los asuntos políticos del grupo, era generalmente considerado como el heredero aparente. Pero no se ha hecho ningún anuncio sobre un sucesor, y Safieddine no ha aparecido en público ni ha hecho ninguna declaración pública desde la muerte de Nasrallah.

El contralmirante Daniel Hagari, portavoz militar israelí, dijo el martes por la noche que Israel aún estaba verificando el estado de Safieddine, y acusó a Hezbollah de intentar ocultar detalles de un reciente ataque en Beirut en un lugar donde se creía que estaba.

El ejército israelí dijo que ha desmantelado infraestructura militante a lo largo de la frontera y matado a cientos de combatientes de Hezbollah.

No había forma de confirmar las afirmaciones de campo de batalla hechas por ninguno de los bandos.

El ejército israelí dijo que desplegó una cuarta división en el sur del Líbano y que las operaciones se han expandido hacia el oeste, pero su enfoque aún parece estar en una estrecha franja a lo largo de la frontera.

Un día después de marcar un año de guerra en Gaza, las fuerzas israelíes libraron intensas batallas el martes (8 de octubre) con militantes palestinos en el norte, donde se ha ordenado a los residentes evacuar.

El líder interino de Hezbollah dijo que Hezbollah respalda los esfuerzos del presidente del Parlamento libanés, Nabih Berri, para alcanzar un alto el fuego. Berri, un aliado cercano de Hezbollah, ha sido visto como el principal interlocutor entre el grupo militante y Estados Unidos, y ha estado tratando de negociar un alto el fuego.

En un seguimiento al discurso de Kassem, el grupo emitió un comunicado diciendo que “no abandonará nuestro apoyo y respaldo a nuestro firme pueblo palestino en la Franja de Gaza”.

Mientras tanto, a medida que aumentan las tensiones en la frontera entre Israel y el Líbano, la comunidad internacional ha hecho un llamado a la paz. El Secretario General de la ONU, António Guterres, ha instado a ambas partes a ejercer la moderación y garantizar la seguridad de los civiles. Dijo: “Estamos profundamente preocupados por el riesgo de un conflicto regional más amplio. Todas las partes deben cumplir con el derecho internacional humanitario y proteger a los civiles”.

El Secretario de Estado de EE. UU., Antony Blinken, también visitó la región y se reunió con líderes israelíes y libaneses. Dijo: “Instamos a todas las partes a ejercer la moderación y buscar una solución pacífica a través del diálogo. Más violencia en la región no beneficia a nadie”.

El jefe de política exterior de la Unión Europea, Josep Borrell, también ha expresado preocupación y dijo que la UE está utilizando todos los canales diplomáticos para reducir las tensiones. Dijo: “Hacemos un llamado a todas las partes para que consideren las consecuencias de sus acciones. Un conflicto regional más amplio sería devastador para todo el Medio Oriente”.

Mientras tanto, la situación humanitaria en el Líbano se está deteriorando. Según la Agencia de la ONU para los Refugiados (ACNUR), miles de personas están huyendo de sus hogares y buscando refugio en otras partes del país. Un portavoz de ACNUR dijo: “Estamos tratando de proporcionar asistencia esencial a las familias desplazadas, pero los recursos son limitados y necesitamos más apoyo internacional”.

El primer ministro libanés, Najib Mikati, ha hecho un llamado de ayuda a la comunidad internacional. Dijo: “Nuestro país ya está enfrentando una grave crisis económica, y este conflicto está exacerbando nuestros desafíos. Necesitamos asistencia humanitaria inmediata y una solución pacífica”.

A medida que la situación evoluciona, el mundo mantiene su atención en la frontera entre Israel y el Líbano. Entre los esfuerzos diplomáticos y la actividad militar, el futuro de la región sigue siendo incierto. Los civiles de ambos lados están pagando el precio más alto de este conflicto y esperan la paz.