Impactante avistamiento de orcas en Antofagasta: depredan lobos marinos y delfines
4 min readCONSTANZA CABRERA
27 de septiembre de 2024, 06:00 CEST
Un reciente avistamiento de orcas en las costas del norte de Chile ha sorprendido a la comunidad científica. Por primera vez desde que se tiene registro, un grupo de estos cetáceos fue visto en la región de Antofagasta, brindando una oportunidad única para investigar una población de orcas previamente desconocida en esta área. Estas criaturas, conocidas por ser los depredadores más poderosos del océano, incluso superan al tiburón blanco en la cadena alimenticia, aunque suelen vivir en aguas más profundas, lo que dificulta su observación.
El primer avistamiento de esta manada se produjo en 2018, cuando pescadores de anchovetas en la bahía de Mejillones vieron a las orcas acercarse a sus embarcaciones. Lideradas por una hembra a la que los científicos más tarde llamaron ‘Dakota’, las orcas aprovecharon la presencia de lobos marinos que intentaban alimentarse de anchovetas atrapadas en redes de pesca, para cazarlos. Este comportamiento depredador fue capturado en imágenes y videos que sirvieron como base para un estudio liderado por la bióloga marina Ana María García Cegarra y su equipo.
“Es un honor poder estudiar a estos cetáceos en su entorno natural, ya que no es común ver a las orcas tan cerca de la costa”, afirmó García Cegarra, bióloga marina de la Universidad de Antofagasta. Su investigación, publicada recientemente en la revista Frontiers in Marine Science, combinó los testimonios de la comunidad local y el uso de drones para monitorear a las orcas entre 2020 y 2023.
Descubrimiento de nuevos comportamientos de caza
Uno de los aspectos más sorprendentes de esta investigación fue la primera captura de imágenes de orcas cazando delfines oscuros en las costas chilenas. García Cegarra explicó que se observó a machos y crías participando activamente en estas persecuciones, que parecían tener un componente lúdico. Estos nuevos datos sobre los hábitos de alimentación de la manada son cruciales para entender mejor la interacción entre las diferentes poblaciones de orcas en el hemisferio sur.
Hasta el momento, la mayoría de los estudios sobre orcas en esta región se habían enfocado en las aguas antárticas. Sin embargo, la información disponible sobre estos cetáceos en áreas más al norte, como Chile, es limitada. Se han identificado cinco ecotipos de orcas en el hemisferio sur, y aunque aún no se ha determinado a cuál pertenece la manada de ‘Dakota’, García Cegarra sugiere que podrían ser del tipo A, que se alimenta principalmente de mamíferos marinos. Para confirmar esta hipótesis, sería necesario realizar una biopsia, un procedimiento complicado por la inteligencia y agilidad de estos animales.
Amenazas crecientes en la bahía de Mejillones
A pesar de la importancia científica de estos avistamientos, los investigadores han expresado su preocupación por las amenazas que enfrentan estas orcas en la bahía de Mejillones. La alta contaminación ambiental causada por la actividad industrial y la operación de varias centrales de carbón podría afectar negativamente a la población de orcas, especialmente a las crías. Los contaminantes pueden acumularse en la grasa de las madres y transmitirse a sus crías a través de la leche materna, poniendo en riesgo su supervivencia.
“El tráfico marítimo y el riesgo de colisiones con embarcaciones también son amenazas importantes para estas orcas”, advirtió García Cegarra. La bahía de Mejillones es un puerto clave para el transporte de mercancías relacionadas con la minería, lo que aumenta el riesgo de que las orcas se vean afectadas por las actividades humanas. Aunque el plan de descarbonización del gobierno chileno estipula el cierre de las centrales de carbón para 2030, la contaminación ambiental sigue siendo una gran preocupación para los científicos y conservacionistas.
Urgente necesidad de protección
El trabajo liderado por García Cegarra ha sentado las bases para futuras investigaciones sobre las orcas en esta región, pero aún quedan muchas incógnitas por resolver. Bruno Díaz, director científico del Bottlenose Dolphin Research Institute, señaló que este estudio es “solo el principio” y subrayó la importancia de profundizar en las dinámicas de esta población de orcas. “Es crucial determinar con qué frecuencia visitan la zona y cómo logran cazar en un entorno afectado por la contaminación y el tráfico marítimo”, comentó Díaz.
En otras regiones del mundo, como el Estrecho de Gibraltar en España, las orcas han desarrollado interacciones frecuentes con embarcaciones, lo que plantea nuevos desafíos para su conservación. Ricardo Aguilar, director de expediciones de la ONG Oceana, destacó la necesidad de adoptar medidas que protejan a estas especies de los impactos de la actividad humana. “Es esencial un esfuerzo conjunto para garantizar la preservación de las orcas y minimizar el impacto que las actividades humanas tienen sobre ellas”, concluyó Aguilar.
El futuro de las orcas en el norte de Chile dependerá de la implementación de estrategias de conservación que mitiguen los riesgos ambientales y aseguren la protección de su hábitat.