El PP critica el plan del Gobierno sobre medios de comunicación, a pesar de su respaldo a medidas similares en Europa

El líder del Partido Popular, Alberto Núñez Feijóo, arremetió este miércoles en el Congreso contra el apartado de medios de comunicación del plan de regeneración democrática presentado por el Gobierno. Feijóo calificó estas medidas como un “plan de censura y persecución” dirigido a los periodistas que critican al presidente Pedro Sánchez. “No se veía una cosa así desde Franco”, afirmó el dirigente del PP, en un claro ataque al ejecutivo socialista.

Sin embargo, gran parte de las medidas que Feijóo critica están alineadas con el reglamento europeo sobre libertad de medios de comunicación, que entrará en vigor en todos los países de la Unión Europea en agosto de 2025. Este reglamento, paradójicamente, fue apoyado por el Partido Popular Europeo (PPE), grupo en el que se enmarca el propio PP español. De hecho, en el documento de compromisos del PP para las elecciones europeas de junio pasado, los populares subrayaron su voluntad de “velar por la correcta aplicación en España de la Directiva europea de Servicios de Comunicación Audiovisual y de la Ley de Libertad de los Medios de Comunicación”, comprometiéndose también a “reforzar el marco normativo de la UE contra la desinformación”.

La ponente principal del reglamento europeo sobre la libertad de los medios de comunicación fue Sabine Verheyen, del Grupo Popular Europeo, lo que evidencia que las iniciativas del Gobierno español no están lejos de las directrices que el propio PP apoya a nivel europeo.

Medidas clave del plan de regeneración del Gobierno

El plan del Gobierno de Pedro Sánchez contempla la creación de un registro de medios de comunicación para que los ciudadanos conozcan a sus propietarios y la inversión publicitaria que reciben. Además, obliga a que todas las administraciones públicas informen anualmente sobre las cantidades destinadas a medios de comunicación y propone la reforma de la Ley de Publicidad y Comunicación Institucional, introduciendo criterios de transparencia, proporcionalidad y no discriminación. También incluye mecanismos para medir las audiencias con métodos verificables y bajo los mismos principios.

Una de las principales preocupaciones que aborda el plan es el riesgo de que algunos medios de comunicación dependan excesivamente de la financiación pública, lo que podría generar distorsiones en la competencia y afectar su independencia. Estas mismas preocupaciones están recogidas en el reglamento europeo, que establece que es esencial que los usuarios sepan con certeza quién posee los medios de comunicación, para detectar posibles conflictos de intereses.

La postura del PP en Europa

A pesar de las críticas vertidas en España, el Partido Popular ya había celebrado en noviembre de 2023 la aprobación del reglamento europeo sobre la transparencia y segmentación de la publicidad política. Este reglamento, defendido por el popular Pablo Arias Echeverría en la Eurocámara, impone la obligación de etiquetar los anuncios políticos, proporcionando información clara sobre su financiación y los responsables detrás de ellos. El PP europeo destacó en su momento que estas medidas reforzarían la transparencia en los procesos electorales y contribuirían a la lucha contra la desinformación.

Desinformación como amenaza a la democracia

El plan del Gobierno también contempla la creación de una comisión en el Congreso de los Diputados para abordar el fenómeno de la desinformación, una iniciativa que el propio PP impulsó en 2017 cuando propuso la implementación de métodos para verificar la veracidad de la información. Curiosamente, en aquel momento el PSOE criticó dicha propuesta calificándola de “censura”. Además, la legislación europea subraya la necesidad de establecer mecanismos que protejan a los usuarios de la desinformación, asignando al Comité Europeo de Servicios de Medios de Comunicación la tarea de supervisar las iniciativas de autorregulación para minimizar los riesgos asociados a la manipulación informativa.

El propio PP ha advertido en varias ocasiones sobre los peligros que la desinformación representa para la democracia. En un seminario organizado por la eurodiputada popular Isabel Benjumea en 2022, esta subrayó que “la desinformación es una amenaza híbrida que está siendo utilizada de manera estratégica para desestabilizar gobiernos y sistemas democráticos”. Pablo Arias, por su parte, enfatizó la urgencia de aprobar el Reglamento sobre la Transparencia de la Publicidad Política, destacando la importancia de combatir las noticias falsas.